Dios mío, una noche más me gustaría darte las gracias por esta gran oportunidad de estar junto a ti. Te pido por favor que me hagas sobrepasar cualquiera de las cosas que elijamos que nos mantengan restringidos de conocerte.
Pido por favor, que me eleves de mis falsedades y mis pretensiones que he ido colocando delante de mí en forma de conocimientos falsos. Te pido también que te lleves de mí la ilusión y puedas asistirme, pese a todo lo que haya hecho.
Me acerco a la puerta del perdón en gracia. Por favor, restaura todo mi valor y mi dicha, para que de esta forma pueda pasar cada día conociendo las bendiciones que nos das a cada rato y pueda estar content@ con todo lo que contemplo como la eterna verdad.
No hay nada en mí que pueda prevalecer para siempre. Todo lo negativo que encuentre en esta vida no tiene que prevalecer para nada. El Espíritu Santo nos acompaña en esta vida.
Dios mío, tú me das las mano de nuestro Señor Jesucristo para que nos acaricie en los momentos del día, también me das fuerzas para elevarme y sobre todo la vista para poder mirarte y la sabiduría para poder comprender que tu voluntad se ha hecho.
En el nombre del padre, del hijo y del espíritu santo.
Amén.