MATERIALES:
1. Vela o velón nuevo de color blanco
2. La cantidad de sal que pueda coger con tu puño
3. Vaso nuevo de cristal transparente
Los elementos que utilices para el ritual, ya no podrás utilizarlos para preparar alimentos u otras actividades en tu hogar.
Primer Paso:
Escoger el día para desarrollar el ritual es fundamental, por ello, para este ritual, es fundamental que se desarrolle el primer domingo de cada mes.
Segundo Paso:
Ya seleccionado el primer domingo de cada mes, procederás a seleccionar un espacio tranquilo, silencioso y en paz, con el fin de llevar a cabo el desarrollo del ritual.
Tercer Paso:
Ubicado el primer domingo del mes, y un espacio tranquilo de tu casa, procederás a buscar una mesa pequeña, tiéndela y adórnala como gustes.
Cuarto Paso:
Toma la vela y enciéndela, colócala sobre la mesa. ¡Importante! Debes encender la vela blanca con fósforos de madera, nunca de fosforeras.
Quinto Paso:
Llenarás el vaso de agua y agregarás un poco de sal. Posteriormente, dejarás la mezcla que hiciste reposar por cuatro horas aproximadamente. Debes dejar encendida la vela blanca, no la vayas a apagar.
Sexto Paso:
Luego de haber dejado reposar la mezcla de agua y sal, lavarás tus manos con esta agua, y mientras lo haces, dirás el siguiente decreto “el dinero es mi aliado y amigo, llega a mí con armonía y equilibrio, soy abundantemente próspero(a)”. Deja que tus manos se sequen solas, evita sacudirlas o secarlas; cuando ya estén totalmente secas, apaga la vela. No apagues la vela soplando la llama, si lo haces así, el magnetismo del ritual se perdería, no tendría efectividad. Simplemente con tus dedos pulgar e índice apaga la llama oprimiéndola.
¿Qué tal te sentiste con el desarrollo de este importante ritual? Si lo haces como te he dicho, llegará a ti la abundancia, el dinero y prosperidad que tanto has querido. Así mismo, vive, interioriza y decreta en ti la afirmación que te he dado a conocer, “el dinero es mi aliado y amigo, llega a mí con armonía y equilibrio, soy abundantemente próspero(a)”.