San Rafael Arcángel es un poderoso intercesor que ayuda, por voluntad de Dios, a sanar la enfermedad física, mental y espiritual.
San Rafael Arcángel es uno de los siete arcángeles que está delante del trono de Dios. Se le conoce como el Arcángel sanador, por su intervención divina con el personaje Tobit, a quién sanó de una ceguera
A San Rafael también se le conoce principalmente como el patrón de los viajeros porque con su ayuda, guía en los viajes espirituales en la búsqueda de la verdad y el conocimiento. También es el patrono de los médicos y de los ciegos.
En el libro de Tobías, capítulos 5 al 9, (Antiguo Testamento), San Rafael ayudó a Tobías a hacer un bálsamos con las vísceras de un pescado, para así ayudar a sanar la ceguera de Tobit, su padre.
Rafael significa “El Señor sana” o “Medicina de Dios” y es comúnmente invocado por los médicos, enfermeras y todo aquel que sufra alguna dolencia o enfermedad
San Rafael comparte su día de fiesta con los otros Arcángeles, San Miguel y San Gabriel, durante la fiesta de los Santos Arcángeles, el 29 de septiembre
La siguiente oración puede ser recitada para invocar a San Rafael Arcángel cada vez que se desee por alguna intención especial
Oh bondadoso y guía espiritual San Rafael Arcángel, yo te invoco como el patrón de aquellos que están afligidos por la enfermedad o dolencia corporal.
Tú hiciste preparar el remedio que sanó la ceguera del anciano Tobías, y tu nombre significa “El Señor sana”.
Me dirijo a ti, implorando tu auxilio divino en mi necesidad actual
(Mencionar aquí la petición)
Si es la voluntad de Dios, dígnate a sanar mi enfermedad, o al menos, concédeme la gracia y la fuerza que necesito para poder soportarla con paciencia, ofreciéndola por el perdón de mis pecados y por la salvación de mi alma.
Enséñame a unir mis sufrimientos con los de Jesús y de María y buscar la gracia de Dios en la oración y la comunión.
Deseo imitarte en tu afán de hacer la voluntad de Dios en todas las cosas.
Como el joven Tobías, yo te elijo como mi compañero en mi viaje a través de este valle de lágrimas. Deseo seguir tus inspiraciones cada paso del camino, para que pueda llegar al final de mi viaje bajo tu protección constante y en la gracia de Dios.
Oh Arcángel San Rafael Bendito, tú te revelaste a ti mismo como el asistente divina del Trono Dios, ven a mi vida y asísteme en este momento de prueba.
Concédeme la gracia y la bendición de Dios y el favor que te pido por tu poderosa intercesión.
Oh gran Médico de Dios, dígnate a curarme como lo hiciste con Tobías si es la voluntad del Creador.
San Rafael, Recurso de Dios, Ángel de la Salud, Medicina de Dios, ruega por mí.
Amén.